Laura San Segundo
Libro de Laura San Segundo "El Recinto Circular". +info
El recinto circular / 2020-2023
En 1940, Jorge Luis Borges publica “Las ruinas circulares”, un cuento en el que un hombre llega a unas ruinas en la selva –el recinto circular– con el propósito sobrenatural de crear a otro hombre en sueños. Un proyecto mágico para el que solamente tenía que dormir y soñar, y que concluye al darse cuenta de que él también era un hombre en el sueño de otro hombre que lo soñaba.
Como en el relato de Borges, ese solapamiento que habla de la realidad dentro del sueño y del sueño dentro de otro sueño es la sensación sobre la que gravita el trabajo de Laura San Segundo, “El recinto circular”; un proyecto que comienza como muchos otros de sus trabajos, sin una historia concreta, dejándose guiar por el diálogo que se genera al relacionar imágenes de distinta naturaleza y por su interés en explorar la capacidad de ilusión y reflexión de la imagen fotográfica más que su carácter testimonial o documental.
De ese interés particular en el pensamiento y la poética visual, surge también su fascinación por la capacidad de nuestra mente para generar imágenes sin una intervención consciente o racional –especialmente cuando meditamos, cuando nos distraemos o nos quedamos absortos, o cuando estamos en un estado de duermevela– y la relación residual que esas imágenes pueden tener con la realidad. Y son precisamente este tipo de imágenes con las que se propuso trabajar, intentando traducir una experiencia en cierto modo intangible a imágenes; ese estado mental en el que ver y dejar de ver o pensar y dejar de pensar se vuelve incontrolable. Ese estado en el que queremos ver algo, pero se nos escapa, o se emborrona, o se oculta; o en el que queremos dejar de ver algo, y se nos aparece una y otra vez.
Su estrategia para representar la idiosincrasia de esos pensamientos y visiones fue hacerlo a través de la edición, de esa manera en que unas imágenes dialogan y se transforman junto a otras; pero, sobre todo, a través de la utilización de los códigos particulares con los que estos pensamientos y visiones operan: la fragmentación, la repetición, el bucle, los saltos temporales, imágenes como ecos de otras imágenes, paisajes como lugares mentales y elementos que desaparecen y aparecen transformados en otra cosa.
La serie resultante la conforman imágenes que tomó en Islandia, en Uruguay, en Japón y en España, además de una serie de fotografías encontradas en anticuarios y mercadillos que le han permitido entretejer, de forma literal, muchos tiempos, y añadir capas a ese tiempo circular en el que se suspende el proyecto. Imágenes sin una conexión espacial o temporal que, como si fuesen los sedimentos que arrastra un río, acaban encontrándose en otro lugar o acumulándose en una grieta.
Laura en el programa de RTVE La Aventura del Saber. Junio, 2024.